Que bonito sería poder decir «que lejos quedaron los días en que nadie consideraba a los rosados jugando en primera». Pero si bien aún falta un buen trecho para llegar a poder hacer esta afirmación con rigor de verdad, sí podemos dar cuenta de ejemplos que se atreven e incluso elevan la vara dentro de este apartado
Tal es el caso del Nuri, el rosado de alta gama de Alfredo Roca. Esta bodega familiar, que lleva un centenar de años en la industria y que hace 45 que produce los vinos que llevan su nombre encontró en este rosado de malbec una vera expresión de su terroir sanrafaelino. Un producto que ya busca desmarcarse desde su misma impronta con una botella que parece mentar a un licor o a una esencia preciosa.
“Tenemos la ventaja de contar con viñedos muy variados, desde algunos muy antiguos a otros que responden a diversas épocas del desarrollo de nuestra bodega.- comenta Alejandro Roca, responsable de los vinos e hijo del patriarca que dió nombre a la bodega- Así que, cuando nos propusimos crear una expresión acabada para este rosado de Malbec pudimos dedicarnos a buscar entre algunas opciones de más de 30 años. Lo importante es que el Nuri salió del propio vino, quiero decir que no estábamos buscándolo, sino que se nos presentó como la posibilidad de crear un producto diferente y de gran calidad. Tan pronto probamos algunas uvas nos dimos cuenta de que teníamos algo muy valioso entre manos y así decidimos tratarlo. Desde nombrarlo por nuestra madre hasta dar un giro absoluto a la hora de elegir la botella.”
El resultado es un rosado claramente pensado a la provenzal, con un trabajo de primera extracción muy cuidadoso, lo que le confiere una variante del color tela de cebolla asalmonado que se destaca entre sus colegas. Pese a una apariencia tan delicada es un vino con muy buena estructura (fruto de una permanencia en contacto con borras finas de 90 días) y una acidez que lo vuelve peligrosamente bebible. Tanto la estructura como la acidez son dos factores que suman a la complejidad y lo habilitan para acompañar platos con cerdo o frutos de mar o ser utilizado como un aperitivo de lujo. Estas características de construcción le ofrecen también un amplio espectro para la maduración en botella. Aunque virtualmente el 2016 esté agotado, los que pudimos hacer la experiencia de un back to back entre aquel y la nueva cosecha podemos dar fe de una evolución, por ejemplo, en las notas de frambuesa muy presentes en la añada 2017. hacia los frutos rojos y toques cítricos más dulces. Decíamos que Alfredo Roca cuenta con viñedos de diversas épocas y también de variedades no tan populares. Por ejemplo la cosecha 2016 tiene un 4% de Sangiovese y la actual un 5 de Pinot Noir.