Cuando el reconocido winemaker Alberto Antonini decidió sentar las bases de su propio proyecto en tierras mendocinas nada casualmente eligió Luján de Cuyo. Y decidió también darle un protagonismo especial a la Bonarda en su forma más fresca. Básicamente el credo de Altos Las Hormigas pasa por la búsqueda dentro de una variedad que entienden noble y con potencialidades que merecen ser exploradas más allá de la innegable carta de presentación del Malbec como tinto patrio, que también lo producen.
Este interés no sólo destaca en su muy reconocida Colonia Las Liebres sino también en sus experiencias dentro del territorio de las burbujas. Ahora, juguetonamente, llega su última incursión en dicho apartado: Como Una Liebre En Marzo 2019. Grandes admiradores de Lewis Carroll tanto el nombre como el bello arte de la etiqueta aluden a la gran compañera de Alicia, suerte de lúbrico crónico preso de los imperativos categóricos de su especie que se desmadran, precisamente, en ese marzo de la primavera boreal.
«La Liebre de Marzo es un espumante que busca ser un vino de placer, como todos los vinos de Altos Las Hormigas– cuenta Federico Gambetta, enólogo de la bodega- Desde la etiqueta donde Chiavazza aporta todo su arte y energía hasta la elección de una tapa corona para que sea más fácil de abrir y por ende más rápido para comenzar a tomarlo. Buscamos un producto algo casual, espontáneo y de amigos. En cuanto al vino en sí es un Charmat Lungo de Bonarda orgánica escurrida y de ahí su color. Si bien se trata de uvas orgánicas como utilizamos una champañera que no está certificada no pudimos usar la denominación en etiqueta. Optamos por realizarlo con una presión de solo 4 atmósferas, contra las 6 que suelen ser la norma para que, además de tener un buen ingreso en boca por su acidez natural, las burbujas acompañen con suavidad. Es frutado, fresco y con algunos aromas a cítricos y levadura. La parte de fruta viene de la cosecha temprana y el resto de la toma de espuma durante su elaboración . Es un vino que invita a tomar y es un claro ejemplo del norte que estamos definiendo con respecto a los espumantes de la bodega.»
Como con otras de su creaciones, este nuevo integrante de la familia juega la nota descontracturada muy bien, pero hay (como en los libros de Alicia) mucho método en esa locura. La etiqueta del artista local Oscar Chiavazza rinde un claro tributo a aquellas primeras y rutilantes ilustraciones de Sir John Tenniel. Pero mientras que aquella bebía té se nota que en su interpretación han mediado los años de la madurez y aquí ya el personaje de marras está en condiciones de pasarse a las burbujas. Con la Bonarda Altos Las Hormigas ha completado un ciclo. Tuvo su Champenoise, después su Pet Nat (o Método Tradicional) y ahora se despacha con un Charmat Largo. Sin embargo tal es su elegancia que el cambio de método no parece hacer mella en esta Liebre. Hay un color de oro rosado (ese pantone me quedó muy pegado de comentar acabados de alta relojería) vibrante. Una primera nariz floral con la tan mentada entrada de una aguja finísima. Luego se abre en boca con una bella parafernalia de frutas rojas, a cual más fresca, frutillas, frambuesas y guindas. Sin duda será un éxito entre los amantes de las burbujas. Y seguro será una bella puerta de entrada para aquellos que aún no sabían que lo eran.