Quizás los menos avisados puedan suponer que Seiko recurre al pasado por falta de ideas. Sin embargo habiendo tenido la posibilidad de apreciar bien de cerca sus procesos creativos soy de la opinión de que la manufactura aspira a una muy japonesa tendencia a la optimización. Volver una y otra vez sobre algo hasta conseguir su versión más lograda. Esto puede darse tanto haciendo más eficiente un mecanismo como depurando la línea de un diseño. Y con el reprise de la línea Vanac de King Seiko nos encontramos con una interesante conjunción de ambos frentes.
Estos nuevos modelos tuvieron un posición destacada en la última presentación de prensa de Seiko y rinden tributo a aquellos innovadores diseños que hicieron su debut en 1972. Aunque los propios responsables de la marca dicen no tener registro de lo que pueda significar el término Vanac ni lerdos ni perezosos (dos cosas que jamás pasarían por la mente de un japonés) enseguida salieron a proponer un acrónimo: Vibrante, Activo, Novedoso, Alternativo y Cómodo. Y bien que le han encontrado la vuelta para recrear el espíritu colorido de este reloj deportivo y urbano con más de medio siglo de vigencia
Como puede verse en aquellas primeras encarnaciones hay toda una explosión de colores vívidos y mucho facetado en las cajas de acero inoxidable de 41 mm que, incluso, se extienden hasta los cristales frontales de plexiglas. Ahora los nuevos Vanacs replican su tamaño aunque homogeinizan en cierto modo su facetado (todos los recienvenidos guardan el mismo perfil) del mismo modo que comparten un grueso cristal plano de zafiro y la ausencia total de bisel. Todas las carátulas lucen también el mismo motivo de líneas horizontales con los puntos para las horas distribuídos dentro de un sutil dodecágono dorado con el indicador de las doce doble y en forma de V, letra que se repite, ligeramente sobredimensionada, como contrapeso del segundero. El motivo de las líneas no es casual puesto que todas las configuraciones de color mentan el horizonte de su ciudad natal, Tokyo. Está el púrpura crepuscular (SLA083), la luz del pleno día (SLA087), el azul-negro de la medianoche (SLA085) más dos colores especialísimos: un amanecer dorado perteneciente a una Edición Limitada de 700 ejemplares (SLA089) y un azul hielo refrendando la luminosidad de un día brillante (SLA091) que sólo estará a la venta en las boutiques exclusivas de Seiko.
Tanto como su perfil, la motorización de la serie completa cuenta con el novedoso calibre in house 8L35 que de ahora en adelante irá dentro de los modelos de alta gama de la marca. Este nuevo King Seiko está tan orgulloso de su corazón que, por primera vez en su historia presenta un fondo de zafiro para que podamos apreciarlo en todo detalle.
